Discurso de presidencia para los «Isidro de Peralta» edición 2018

Queridos amigos, socios y defensores de nuestro patrimonio cultural:

En nombre de la Junta Directiva y de todos los socios de Mellaria, quiero expresar nuestra felicitación a los dignos merecedores de la decimoséptima edición de los premios Isidro de Peralta, que acabamos de entregar.

Este año, la asamblea General de Socios ha aprobado el nombramiento de socios de Honor a nuestro socio y amigo el pintor tarifeño Manuel Reiné y al también pintor de nuestra tierra Juan Quintero. Ambos nombramientos han sido otorgados por la buena disposicion de ambos artistas ante los requerimientos de Mellaria, y por tanto, a beneficio de nuestro patrimonio. Por ello, le entregamos un diploma como muestra de nuestro agradecimiento. Los socios Lucrecia García Vegara y Vicente Rivero Santamaría entregan sus diplomas a Manuel Reiné y a Juan Quintero respectivamente.

Como viene siendo habitual en estas ceremonias, el presidente (en nombre de la Junta Directiva) hace balance de este último año en las cuestiones relacionadas con nuestro patrimonio cultural.

Año tras año repetimos los mismos temas, por lo que no lo haremos en esta ocasión. Todas las causas que lleva adelante Mellaria siguen anquilosadas con el paso de los años, y como es natural, el deterioro va en aumento sin que medie por parte de los responsables un poco de sensibilidad para su mantenimiento.

No obstante, este año tenemos una buena noticia que nos llega desde la Unesco: este organismo ha declarado Patrimonio de la Humanidad la técnica de construcciones en piedra seca, realizadas a golpe de mazo y de esfuerzo humano y utilizando como único material la piedra de nuestro entorno y la tierra de nuestros campos. En Tarifa tenemos esparcidas por toda la campiña numerosísimas obras realizadas con esta técnica. Muchas de ellas, que corresponden principalmente a casas, hornos de pan, estancias de animales o cercas, se encuentran en buen estado de conservación, otras muchas, principalmente las de los poblados que se han ido abandonando con el paso de los años, han perdido su techo, ventanas y puertas, pero conservan sus muros de piedra seca, que de forma altiva dan un toque mágico a nuestro paisaje rural.

En cuanto a la batalla de Mellaria por nuestro patrimonio, tenemos que decir que es una lucha infructuosa. Los ofrecimientos de colaboración que Mellaria realiza al Ayuntamiento son ignorados, los escritos de advertencias y de información facilitados por nuestros especialistas son desatendidos sistemáticamente. Por ello, Mellaria llega a la conclusión de que la corporación municipal tiene otros intereses prioritarios por encima de la conservación de nuestro patrimonio. En Mellaria tenemos la sensación de que desde el Ayuntamiento miran a nuestra veterana asociación como una incomodidad en lugar de verla como lo que es: un movimiento ciudadano entregado altruistamente al bienestar de su pueblo.

La situación patrimonial de Tarifa se puede ya calificar como dramática y en muchos casos irreversible.

Desde Mellaria no hemos conseguido, a pesar de que lo hemos solicitado, enterarnos del presupuesto de Patrimonio del año 2018. El concejal nos remitió a la aprobación de los presupuestos en el que se indicaba la ridícula e irrisoria cantidad de 5.000 euros para todo el año anterior, circunstancia que podría explicar el abandono total de nuestro patrimonio. A lo largo de ese pasado año se ha podido apreciar la inversión de mucho dinero por parte del área de Cultura del Ayuntamiento (bien con subvenciones solicitadas para el efecto o sin ellas) destinado a actos de carácter lúdico, que no han repercutido en absoluto en el bienestar y en la atenuación de la decadencia de nuestra Tarifa patrimonial.

Algunos de los temas prioritarios de Mellaria, después de muchos años de lucha, han sido aprobados con el resultado contrario al solicitado, situación que está consiguiendo afianzar el deterioro, la falta de personalidad y la pérdida de la esencia de este pueblo milenario. Hablamos ni más ni menos que de la Comisión Municipal de Patrimonio, en la que Mellaria había puesto sus esperanzas para que fuera salvaguarda de nuestro querido pueblo de Tarifa.

La petición de arqueólogo municipal también fue una de las reivindicaciones de Mellaria, y el puesto de historiador del Arte hubiera sido el complemento ideal para nuestro único objetivo, que no es más que el de la protección del núcleo intramuros.

Nada más lejos de nuestros deseos es lo que está sucediendo. La Tarifa relegada a los intereses comerciales sigue paso a paso nutriéndose de las cenizas del amado pueblo heredado de nuestros antepasados.

Nuestra fisonomía de pueblo milenario, asentada a golpe de historia, de personajes, de detalles, de piedra labrada, de reja fundida, de rincones y calles estrechas que quieren evitar el fuerte viento o de las reducidas y coquetas plazas que conocieron tiempos mucho mejores, se malogra gota a gota debido al abuso de quien no ve en Tarifa nada más que un lugar para hacer dinero y de quien teniendo la obligación de velar por su integridad mira para otro lado sin tener en cuenta las consecuencias.

Si exprimimos este patético discurso llegaremos inevitablemente al germen de la pérdida de Tarifa, que no es ni más ni menos que el dejar hacer en contra de la legislación y el de no adaptar dicha legislación a los intereses que se necesitan para la conservación integral de nuestro pueblo. Ello nos lleva inevitablemente a la Comisión Municipal de Patrimonio, motivo por el que este año ha sido nombrada Mención Chapuza de los XVIIº Premios Isidro de Peralta; triste mención digna de una comisión que no sabe cumplir con sus obligaciones. La composición de dicha comisión fue causa de alegaciones por parte de Mellaria, ya que deseaba que estuviera compuesta por técnicos responsables de sus actuaciones y no por miembros político o personal dependiente directamente de ellos. Es una Comisión que adolece de ser endógena, no dando voz a las asociaciones de defensa del Patrimonio u otras administraciones o entidades, como ocurre con la comisión Provincial, que podrían aportar un parecer objetivo no ligado a intereses particulares o politicos.

Desde esta edición de Premio Isidro de Peralta tengo la desagradable y triste obligación de comunicar que la personalidad del pueblo de Tarifa está agonizando y que sin una respuesta unánime de toda aquella persona que se considere tarifeña y que desee transmitir Tarifa a las generaciones futuras, todo estará perdido definitivamente. Mellaria no puede hacer nada ante la apatía y la indiferencia de los tarifeños que aceptan la derrota de nuestra idiosincrasia y de la personalidad tarifeña tamizada de generación en generación.

Afortunadamente, hoy tenemos la ocasión y la suerte de terminar este discurso con un hálito de esperanza y de fe en nuestro pueblo, la actuación de un grupo de tarifeños que se ha empeñado en conservar nuestro patrimonio folclórico. Gracias a ellos seguimos conservando una parcela auténticamente nuestra.

Damos las gracias a la Delegación de Cultura de este Ayuntamiento por la cesión de este bonito marco para la celebración de nuestros premios, a la pastelería La Tarifeña por su colaboración en los aperitivos y a todas las personas que nos han ayudado en la preparación del acto.

También damos las gracias a todos los asistentes. Y antes de que los premiados y socios de Mellaria disfrutemos de una copa organizada con modestia, pero con todo nuestro corazón, pasamos a la actuación del grupo de Chacarrá Nuestra Señora de la Luz.

 

 

Este sábado se entrega el premio «Isidro de Peralta» al grupo de Chacarrá de Tarifa

La mención negativa Chapuza se concedió a la Comisión Municipal de Patrimonio

ISIDRO-5El próximo sábado día 23 de febrero a las 19,30, en la iglesia de Santa María, la asociación tarifeña de defensa del patrimonio cultural, Mellaria, hará entrega de sus premios «Isidro de Peralta».

El premio «Isidro de Peralta», que reconoce al personaje o entidad que ha destacado en el año 2018 en favor del patrimonio cultural tarifeño, ha recaído en el grupo de Fandango Tarifeño, «Nuestra Señora de la Luz», por su empeño y su constancia en mantener vivo el patrimonio folclórico de Tarifa a pesar del proceso de falta de personalidad que está sufriendo la localidad.

Las menciones especiales se darán en esta ocasión a Tarifa Directo y Cerámica Tarifa, entidades que colaboran con la asociación en sus diferentes parcelas.

Este año, además, se incluirá en el evento el reconocimiento de dos pintores tarifeños, Manuel Reiné y Juan Quintero, que ponen su arte altruístamente a disposición de Mellaria, por lo que han sido nombrados «Socios de Honor» de la asociación.

La mención «Chapuza», con la que se quiere resaltar a personas o entidades cuya actuación u omisión han perjudicado el patrimonio cultural de Tarifa durante el año 2018, se ha concedido a la Comisión Municipal de Patrimonio, por que los resultados de su actividad no han sido positivos para la protección de nuestro patrimonio, ni para la defensa de la identidad y personalidad del pueblo de Tarifa, siendo además una comisión que actúa a espaldas de asociaciones de defensa del patrimonio u otras administraciones que puedan aportar opiniones no ligadas a intereses particulares o políticos.

La asociación Mellaria invita a esta decimoséptima edición de los premios «Isidro de Peralta» a todas aquellas personas que estén interesadas.

 

Ante la falta de arqueólogo e historiador del arte municipales

Mellaria se pregunta cómo está funcionando la Comisión de Patrimonio histórico sin estos funcionarios

Incumplimiento del PEPRICH junto a monumento
Incumplimiento del PEPRICH junto a monumento

La Asociación Tarifeña de Defensa del Patrimonio Cultural, Mellaria, se ha dirigido al alcalde y al concejal de Cultura del Excmo. Ayuntamiento de Tarifa y a la Delegación Territorial de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía en Cádiz para transmitirle su preocupación por la falta de puestos de arqueólogo e historiador del arte de este Ayuntamiento, figuras ambas contempladas en la Comisión Municipal de Patrimonio Histórico. Mellaria se pregunta qué solución se le está dando a las reuniones de dicha Comisión ante la falta de estos miembros técnicos, que estima imprescindibles para el correcto funcionamiento de este órgano municipal.

Mellaria se muestra opuesta a que los citados cargos sean ocupados por “falsos autónomos”, no sólo por ir claramente en contra de los intereses laborales de los trabajadores y ser opciones de contratación ilegal, sino principalmente porque estos autónomos están exentos de las responsabilidades como funcionarios, un requisito que Mellaria entiende indispensable para ocupar un cargo en un órgano municipal como es la Comisión Municipal de Patrimonio Histórico.

Mellaria ha solicitado información de cómo se están cubriendo actualmente las competencias del cargo de arqueólogo e historiador de arte. El puesto de historiador es además pieza clave, según informaron a la asociación desde la Concejalía de Cultura, en la labor de la Patrulla de Patrimonio; por este motivo la asociación se pregunta sobre la actual actuación de dicha patrulla, dado que las agresiones e incumplimiento del PEPRICH se siguen cometiendo con total impunidad en nuestro casco histórico.

Alegaciones a la Comisión de Patrimonio Histórico

NOTA DE PRENSA

Las propuestas de Mellaria iban dirigidas a impedir el pleno control político de una comisión que debe tener exclusivo carácter técnico

En la sesión plenaria del 24 de enero pasado se aprobó definitivamente el Reglamento de la Comisión Técnica Municipal de Patrimonio Histórico con los votos a favor de la mayoría de gobierno. En este acuerdo plenario se desestimaron todas las alegaciones presentadas por Mellaria, las únicas que fueron hechas en el periodo de alegaciones públicas.

La mayoría de las numerosas alegaciones de la asociación tarifeña de defensa del patrimonio cultural Mellaria iban dirigidas a evitar el pleno control político de la Comisión de Patrimonio Histórico, permitiendo que dicha comisión tuviera la mínima dependencia política, lo que redundaría en beneficio de su carácter técnico.

La asociación Mellaria, que ahora cumple 18 años de vida, y es gran conocedora del patrimonio cultural de Tarifa, ha expresado su profundo malestar por la rotunda negativa del equipo de gobierno municipal a aceptar, aunque sea algunas, de las sugerencias que hizo al citado reglamento Lo que desde Mellaria se entiende como el deseo municipal de evitar la participación ciudadana en asuntos que a todos nos conciernen.

Mellaria denuncia que no se han rebatido ninguna de las alegaciones que presentó y que por lo tanto desconoce las razones municipales para negarse a aceptar las sugerencias que la asociación hizo para mejorar el reglamento de la Comisión de Patrimonio Histórico.

En la sesión plenaria se aprobó un informe jurídico que viene a decir que el reglamento que presentó originalmente el Ayuntamiento es legal, lo que Mellaria nunca ha puesto en duda. Pero nada se dijo en el pleno municipal de las razones para no aceptar las propuestas de Mellaria, siendo preceptivo que así se haga.

Mellaria valora muy negativamente el reglamento de la Comisión de Patrimonio Histórico y entiende que su aprobación es una irresponsabilidad que en el futuro puede traer consecuencias perjudiciales para el patrimonio cultural tarifeño, dado que la mayoría de sus miembros pueden ser elegidos con amplia libertad por el alcalde y concejales.

Alegaciones al reglamento de la Comisión de Patrimonio

NOTA DE PRENSA

Mellaria ha presentado alegaciones al reglamento para el funcionamiento de la comisión técnica municipal de patrimonio histórico recientemente aprobado por el pleno municipal; en concreto se critica la forma prevista para la constitución de la comisión que tendrá que velar por la protección cultural del conjunto histórico de Tarifa.

La Asociación Tarifeña de Defensa del Patrimonio Cultural defiende que dicha comisión debe tener un carácter eminentemente técnico, por lo que se opone a que haya participación de cargos políticos, como podría ser el concejal de Cultura o Urbanismo, excepción hecha del alcalde que tiene que presidir todos los órganos municipales, quien a su vez podría delegar esta competencia.

En orden a defender el carácter democrático de la comisión que se quiere crear, Mellaria propone que todos sus vocales sean nombrados por el pleno municipal y no por decreto de la alcaldía como recoge el proyecto de reglamento aprobado. Igualmente solicita que las propuestas de miembros de la comisión sean hechas por el alcalde y en modo alguno por los concejales de Cultura y Urbanismo, pues esto representaría una inaceptable dejación de autoridad de la máxima jerarquía municipal.

Mellaria entiende que el reglamento aprobado deja una gran libertad para la elección de los vocales de la comisión de patrimonio, lo que podría permitir que la comisión se adecuara a los intereses políticos de los gobernantes de turno, perdiendo la independencia que exige un órgano técnico de estas características.

Por esta razón, se propone que el reglamento recoja expresamente quiénes formarán la comisión de patrimonio histórico no dejando su elección al arbitrio de los responsables políticos, evitando también de este modo que puedan ser vocales de una comisión con tan gran trascendencia personal técnico contratado temporalmente o por contratación externa.

Mellaria en sus alegaciones al reglamento de la comisión de patrimonio histórico considera que, además de los técnicos municipales, a la comisión deben pertenecer miembros externos al Ayuntamiento, lo que mejoraría la independencia de la comisión que se quiere crear.

Finalmente, Mellaria se opone a que la Junta de Andalucía conceda la delegación de competencias sobre el casco histórico al Ayuntamiento, a no ser que la comisión municipal de patrimonio, sobre quien recaerá estas competencias, se constituya con plenas garantías de ser un órgano técnico e independiente.

Regularización del uso de las calles en el Casco Histórico

NOTA DE PRENSA

La Asociación Tarifeña de Defensa del Patrimonio Cultural, Mellaria, ha salido al paso de las declaraciones del concejal de Patrimonio, Francisco Terán, sobre el estado de nuestras calles y el incumplimiento de la legislación vigente, coincidiendo plenamente con ellas.

Desde Mellaria se apoya el fomento de la actividad hostelera en nuestras calles, si bien con el debido control que marca nuestra legislación.

La actividad comercial y la actividad vital del pueblo deben de ser compaginadas y por ello vemos muy positivas esas mesas de trabajo organizadas por la Delegación de Patrimonio que indica Francisco Terán, entre Ayuntamiento y comerciantes; si bien Mellaria apunta que nunca se puede llegar a un acuerdo satisfactorio para el pueblo si a esas reuniones no acuden representantes ciudadanos o de asociaciones como AVECTA o la misma Mellaria.

La Asociación Tarifeña de Defensa del Patrimonio Cultural hace hincapié en que el embellecimiento de Tarifa es el mejor acicate para el turismo y para sus vecinos. Por ello está de acuerdo con el concejal en el control de mobiliario en nuestras calles. Para Mellaria sería muy interesante que se exija la legislación de sillería y mesas para los bares (PEPRICH, artículo 29-1), acordes a la categoría del casco antiguo y que actualmente se ignora por completo; sería imprescindible que cada bar tuviera la obligación de exhibir el plano con la autorización municipal de mesas y sillas, tal y como sucede en muchos lugares y como tuvo la intención de hacer el actual gobierno; también sería imprescindible que se respete la ley en cuanto a la prohibición de utilizar las vías públicas como almacén de mobiliario y la colocación de accesorios expresamente prohibidos por la legislación, como por ejemplo los carteles colocados en banderola..

Sobre este asunto, Mellaria sigue insistiendo en la restauración de la Comisión de Patrimonio, pero hasta el momento las conversaciones mantenidas sobre el tema siguen sin dar un resultado efectivo. La Comisión de Patrimonio es un instrumento indispensable para el control de las ilegalidades que se cometen constantemente en nuestro casco histórico.

Mellaria apuesta por una Tarifa atractiva para ciudadanos y visitantes, una Tarifa que compagine la actividad comercial con la estética de su casco antiguo, circunstancia que se ha conseguido en multitud de lugares y que, por tanto con buena voluntad y respeto a nuestro pueblo, se puede lograr también en el extraordinario marco del casco histórico de Tarifa.