NOTA DE PRENSA
La Iglesia de Santiago es uno de los elementos patrimoniales de Tarifa que más ha sufrido los rigores del tiempo y de la falta de mantenimiento y de voluntad a la hora de ser recuperado. Además, recordemos que hace ya más de dos años se destruyó parte de la misma, en concreto los restos de la capilla de Nuestra Señora de La Encarnación y San Lorenzo, debido a las obras de rehabilitación que se estaban acometiendo en el edificio anexo, la antigua Residencia de Suboficiales. A propósito de este desgraciado asunto, seguimos sin saber si se inició expediente administrativo, si hubo sanción pertinente a los causantes del estropicio, ni si se les va a exigir a los mismos algún tipo de reparación, algo que tememos no ocurrirá, aun cuando una sanción contundente a una actuación que ha destruido parte del patrimonio, a unas obras en una zona especialmente sensible sin, presuntamente, control arqueológico y que ha privatizado el espacio anexo a la muralla que siempre había sido de acceso público impidiendo que la Ruta del Adarve tenga su salida natural donde siempre estuvo, habría sido muy educativa y ejemplarizante.
La asociación Mellaria celebra la noticia en la que se anunciaba la cesión de la iglesia al Ayuntamiento de Tarifa por parte del Obispado de Cádiz y Ceuta, pero se muestra cautelosa ante el posible uso o rehabilitación que se dé por el Consistorio a ese edificio, pues hasta la fecha cuantos proyectos de rehabilitación y puesta en valor de nuestro patrimonio se han realizado en Tarifa, ninguno ha contado con las posibles y siempre enriquecedoras aportaciones de asociaciones culturales locales y su enfoque se ha realizado, a veces, incluso de espaldas a éstas, pues los proyectos se han presentado cuando ya eran realidad y, en algún caso, parecían haber sido redactados con falta de información y documentación por técnicos ajenos o desconocedores del bien en cuestión.
Ahora será el Consistorio el encargado de su gestión, reparación y mantenimiento, así como de velar y pedir responsabilidades por el posible o presunto uso indebido que se viene haciendo por parte del apartahotel de los restos de la iglesia como almacén de leña o lugar donde colocar maceteros, así como de exigir la eliminación de su aparcamiento construido sobre los restos de la capilla de la Encarnación. Nos reiteramos en la duda de que se aclaren los hechos anteriormente descritos buscando y exigiendo responsabilidades a los autores de la destrucción de la mencionada capilla.
Desde Mellaria exigimos que el Consistorio Tarifeño -el actual y los futuros- se comprometa públicamente a no vender este elemento patrimonial pasando a manos privadas, pues reclamamos que la Iglesia de Santiago, recuperada y rehabilitada, permanezca como bien público y elemento cultural de nuestra ciudad, que sea puesta en valor y destinada a un uso cultural acorde con sus características y su entorno.